La vida como viaje y el viaje como metáfora de la vida son construcciones simbólicas de gran rendimiento en la literatura desde la Iliada, cuyas referencias este libro no oculta. De la escritura hecha vida a la vida sentida como escritura se despliega El mar o la impostura que, con su tono narrativo, culmina el período más simbolista , de la poesía de Jorge Urrutia que se inició, en 1991, con Invención del enigma, para continuarse en Cabeza de lobo para un pasavante (1996) y Una pronunciación desconocida (2000). Es una obra que se ha desarrollado fuera de modas y de grupos, constituyendo una manifestación poética singular. |