978-84-96171-21-3 Título
Casa del Juez, La  
Autores Simenon, Georges           
Editorial Booket  Nº edición  Año  Jul/2004
Colección  Maigret  Nº colección  5011-22  Páginas  193 
 
Materias



Bolsillo


Encuadernación  Rústica 
Largo  18  Ancho  11 
Idioma  Castellano 
Estado
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  P.V.P. 
 
   6,95
 
 
Reseña del libro
En el aburrido pueblecito marinero de L'Aiguillon, el anciano matrimonio Hulot mata el tiempo espiando a su vecino, un honorable juez jubilado, porque ha visto «extraños movimientos» en su casa. Tras montar vigilancia día y noche, sus expectativas no se ven defraudadas: el juez oculta un cadáver en la habitación, y puede querer desembarazarse de él en cualquier momento. Enterados de que el célebre comisario Maigret se halla en la región, los Hulot le ponen en antecedentes.
Maigret no sólo pilla al juez Forlacroix en el preciso instante en que intenta hacer desaparecer el cadáver, sino que poco a poco, seducido tal vez por la copa de armagnac que Forlacroix le ha ofrecido en su confortable casa, se deja Ilevar por uno de sus pasatiempos favoritos: inmiscuirse en las vidas ajenas. Y ante él desfilan jóvenes donjuanes, madres desconfiadas, bellas hijas casaderas... ¡Pero el apacible pueblecito oculta historias de amor muy antiguas y viejos rencores que Maigret tendrá que descubrir si quiere solucionar este caso! 
 
Bio-bibliografía del autor
Georges Simenon nació en Lieja en 1903 en una familia de escasos medios. Pese a ser un alumno dotado, abandonó pronto la escuela y, muy joven, trabajó de reportero en Lieja. En 1922, ya en París, se introdujo en los ambientes de Montmartre y publicó con seudónimo numerosas novelas populares. En 1931 inició la célebre serie de novelas protagonizadas por el comisario Maigret. Tras una época de grandes viajes, inició una gran amistad con Gide y comenzó a publicar las llamadas «novelas duras». Durante la segunda guerra mundial ocupó el cargo de alto comisario para los refugiados belgas, pero la necesidad de mantener a la familia le impidió dejar la escritura. Acabada la guerra, se instaló en Norteamérica, y en 1955 volvió definitivamente a Europa. En 1972 decidió abandonar la narrativa, si bien siguió escribiendo textos autobiográficos, y murió en Lausana en 1989.