Los relatos que dan forma a El corazón es mentiroso convirtieron a J.T LeRoy en autor de culto a los dieciséis años. En ellos relata de modo desgarrador su infancia y primera adolescencia: su madre lo tuvo a los catorce años e inmediatamente lo abandonó en un orfanato, del que lo sacaría poco tiempo después para llevárselo en busca de la felicidad del Sueño Americano. En ocasiones, cuando LeRoy era ya un adolescente, su madre lo vestía de chica y lo presentaba como su hermana pequeña, hasta que con el tiempo compartieron hombres y drogas. La sordidez de dicha historia queda plasmada en estas páginas, relatos oscuros y desgarradores que, no obstante, desprenden chispazos de ironía y esperanza.
A los catorce años, LeRoy pensó en suicidarse, pero tras consultar a un psicólogo e iniciar una terapia, convirtió sus miserias en un libro, El corazón es rnentiroso, un título que ha entrado como lectura obligatoria en el programa de estudios de la Universidad de Yale.
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