En menos de lo que se tarda en contarlo se hace un retrato. ¿Qué misterio ocultan esos ojos? ¿Qué hay de cierto en el dicho “los ojos son el espejo del alma”? Algunos aseguran que sí, que algo hay de verdad, pero a estas dos partes del refrán, “ojos y espejo del alma”, las separa un hilo mediático, de intenciones y de metas. Los temas habituales en fotografía: composición, iluminación, exposición y técnica con la cámara, entran en juego al realizar un retrato. Las variables de carácter y fisonomía conducen a que se asuma una relación entre realidad y representación. Dos palabras cargadas de magia que conllevan el reto de representar el carácter tal como se ve y que generan oportunidades para la fotografía creativa. Lo fundamental, sin embargo, es ser consciente de que la veracidad de un retrato depende de la perspicacia y la integridad del fotógrafo, de la honestidad del sujeto, de las técnicas fotográficas ydigitales utilizadas y de las manipulaciones realizadas. A diferencia de casi todos los demás tipos de fotografía, el buen retrato fotográfico requiere siempre de la colaboración entre fotógrafo y sujeto. Todas las imágenes que aparecen en el libro van acompañadas de una descripción que explica cómo y por qué se tomaron las fotos. Este libro apunta directamente al corazón del retrato fotográfico, aquello que realmente importa: cómo crear retratos elocuentes, interesantes e irresistibles de nuestra familia y nuestros amigos.
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