Los diferentes ensayos que componen este libro, escritos por Jorge Alemán, Mustapha Cherif, Francisco Díez deVelasco, Félix Duque, Patxi Lanceros, Javier de Lucas, Francisco José Martínez, Jorge Pérez de Tudela y Slavoj Zizek,tratan de un fenómeno a escala mundial de imprevisible alcance, producido por la incesante globalización en los planoseconómico y político. Por un lado, la emigración a partir de países del llamado Tercer Mundo o del Este de Europa,todavía controlada en Europa y Norteamérica en la segunda mitad del siglo pasado, es cada vez más intensa, noexenta de violencia, y se debe más a las penuria de los países de origen que a razones políticas.Por otro, los inmigrantes ya instalados en el corazón de la Europa Occidental y en franjas de los Estados Unidos (especialmenteel Sur y el Oeste Medio) suponen un factor de inquietud, cercana a la revuelta, por razones en las que sealían la falta de ideales y de valores en gentes incluso de tercera o cuarta generación (política y jurídicamente igualesen todo a los nativos, al menos teóricamente), el rechazo xenófobo de buena parte de la población nativa (lo queproduce una reacción de explosiones cada vez más violentas e incontroladas de un orgullo herido), y la importaciónen esos jóvenes airados de valores y manifestaciones culturales procedentes de la «contracultura» de esos mismospaíses que acogen (por parte de empresas interesadas en mano de obra barata) y a la vez rechazan (por parte de lasclases medias a duras penas consolidadas) la inmigración, y ya no solamente la clandestina.Todo ello constituye un verdadero desafío para las ciencias sociales en general y muy en especial para la filosofíaen su vertiente continental, obsesionada desde mayo de 1968 con el problema de la alteridad, pero al parecer sindemasiado éxito en planos más concretos y cercanos al latir cotidiano de las grandes ciudades europeas y norteamericanas. |