Guionista, programadora y realizadora de RTVE, Lolo Rico fue de las primeras mujeres que desempeñaron puestos de alta responsabilidad en el ente público. Pero sobre todo es conocida y recordada por haber sido la creadora y directora de un programa único en la historia de la televisión de este país: La bola de cristal. Mujer adelantada a su tiempo, con siete hijos a sus espaldas, decidió separarse cuando nadie lo hacía, dejando atrás la alta sociedad de la que formaba parte. Participó activamente en el movimiento antifranquista y, posteriormente, en Barcelona, convivió con editores y escritores vinculados a la gauche divine. Los ochenta los vivió con intensidad creadora y, al tiempo que sacaba adelante a su extensa familia, supo crear, durante más de cuatro años, un programa mítico para toda una generación (o más de una). Sus ideas, su familia, sus amores, sus fracasos, su relación con personas irrepetibles (Rosa Chacel, Ernesto Sábato, García Márquez, Carlos Barral, Manuel Piña...) se dan cita en este emotivo y sincero de memorias que bucea tanto en su infancia como en los claroscuros propios de una vida. Una vida, eso sí, rica en acontecimientos y encuentros inolvidables con personajes como Naguib Mahfuz o Nawal El Saadawi. Mucho más que icono o referencia generacional, estamos ante el autorretrato (sincero y libre, esclarecedor y sombrío, crítico y también autocrítico) de una mujer valiente y comprometida que, sin apenas darse cuenta, ha visto cómo el tiempo ha pasado deprisa. Muy deprisa |