Entre todos los personajes heroicos que protagonizaron nuestra Edad Media, sólo uno alcanzó fama y reputación europea; ese héroe es Rodrigo Díaz de Vivar, el llamado Cid Campeador. Pero al lado de la leyenda y los cantares existió otro personaje de carne y hueso, el verdadero Rodrigo Díaz de Vivar, el magnate castellano que, desterrado de su tierra burgalesa, con sólo su espada supo crearse un principado en Valencia, tan importante o más que alguno de los reinos cristianos coetáneos. La presente obra glosa la vida de Rodrigo Díaz de Vivar a partir de testimonios históricos que convivieron o pudieron convivir con el desterrado castellano. |